Pessoas como tu…


Pessoas como tu têm dificuldade em ser felizes. Sentem, no fundo, que a felicidade é uma palavra demasiado cara para ser empregue na sua vida. Que desperdício!

Pessoas como tu vieram a este mundo para servir. A sua missão é entregar-se os outros, muitas vezes, esquecendo de si próprias: - O melhor não é para ti, é para os teus. Tu desenrascas-te e consegues viver (ou será sobreviver?) de qualquer modo. Há que pensar nos outros, esses sim, têm múltiplas razões que justificam o seu comportamento e o seu destino.

Ouves constantemente uma voz interna que te alerta para o que precisas fazer pelos outros. Essa voz surge vestida de culpa, envolta em capas de angústia e preocupação. Acordas de manhã com um nó e fazes um roteiro mental para solucionar o problema X, como pagar aquela conta, não esquecer de visitar o tio José que está doente e, ainda, ligar à amiga Maria que está, novamente, em crise conjugal e precisa de desabafar.

Os dias consomem-te e tu só gostavas ter mais tempo para ouvires a tua mãe que te liga com desabafos a meio do teu dia, emaranhada nos seus problemas, sem se aperceber que tu, também, tens os teus. Manobras o stress no trabalho a muito custo e esticas as horas para conseguires cumprir o deadline daquele projecto que só tu podes dar seguimento.

Não consegues deixar cair nada. Tens os teus filhos a cargo e, disfarças sempre… cara alegre e atitude positiva, mesmo quando não consegues dormir e as lágrimas escorreguem, dando voltas ao miolo para conseguir pagar a hipoteca da casa.

Pessoas como tu não desistem. Não desistem de fazer tudo o que podem (e o que não podem) pelos outros, de sentir empatia e compaixão.

Este mundo é muito melhor graças a pessoas como tu. Obrigada.

P. S – Deixa-me que te diga: pessoas como tu merecem ser felizes…!


[Imagem retirada de jopidibuja]

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Texto en Español

Personas como tú tienen dificultad en ser felizes. Sienten, en el fondo, que la felicidad es una palabra demasiado cara para ser usada en su vida. Qué desperdicio! 

Personas como tú vinieron a este mundo para servir. Su misión es entregarse a los demás, y a menudo, olvidarse de sí mismos: - Lo mejor no es para ti, es para los demás. Tu puedes vivir y arreglarte (o sobrevivir?) de cualquier modo. Hay que pensar en los demás, esos sí, tienen múltiples razones para su comportamiento y su destino. 

Constantemente escuchas una voz interior que te alerta para la necesidad de hacer por los demás. Esa voz viene vestida de culpa, envuelta en capas de angustia y preocupación. Te despiertas por la mañana con un nudo y haces un guión mental para resolver el problema X, la forma de pagar esa cuenta, que no se te olvide de visitar a tu tío José, que está enfermo y también llamar a tu amiga María, que está de nuevo en crisis conjugal y necesita desahogarse. 

Los días corren y sólo te hubiera gustado tener más tiempo para escuchar a tu madre que te llama al medio día, enrollada en sus problemas, sin darse cuenta de que tu también tenes los tuyos. Llevas el estrés en el trabajo con un gran esfuerzo y haces largas horas para lograr cumplir  el plazo de ese proyecto que sólo tu puedes terminar. 

No dejas caer nada. Tenes tus hijos a cargo y siempre con una cara alegre y una actitud positiva, incluso cuando no logras dormir y las lágrimas deslizán por tu cara, dando vueltas pensando como vas a pagar la hipoteca de tu casa. 

Personas como tú no se rinden. No se dan por vencidos y hacen todo lo posible (y lo imposible) por los demas, con empatía y compasión. 

Este mundo es mucho mejor gracias a personas como tú. Gracias. 

PS – Dejame que te diga: Personas como tú merecen ser felizes...!



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