Argentina, o centro do mundo

 

Notícia de última hora: no ano 2022, a Argentina sagra-se campeã mundial de futebol, pela terceira vez. As imagens que chegam ao resto do mundo são de uma loucura total, um entusiasmo febril que impulsiona milhões de pessoas a saírem à rua em celebração.

Acredito que, para muitos, este fenómeno não seja bem compreendido; afinal de contas, falamos, apenas, de futebol. Mas para os argentinos é muito mais do que isso. Este acontecimento representa o alcance de um objetivo, uma forma de superação e a união de um país que se entrega à alegria. Ali sabe-se bem viver o momento, o sangue latino corre-lhes pelas veias e a festa é garantida.


Estou, obviamente, feliz por esta vitória – não tanto pelo futebol, mas sobretudo por sentir o calor das pessoas com quem partilho as minhas origens. Este povo conhece de cor o sacrifício, a dor, o sofrimento. Embora com inúmeros recursos, a Argentina é um país muito instável em termos económico-sociais e as suas gentes são exímias na arte de conseguir sobreviver a cada mês, a cada subida de preços, a cada punhalada da inflação. Também têm de gerir a falta de segurança, a violência e a corrupção. Porém, os argentinos não baixam os braços, nunca deixam nada por dizer. Lutam, manifestam, protestam. Saem à rua, sempre.

E eu sou herdeira dessa voz que não se cala. Recordo-me, em criança, em Portugal, alguns miúdos, quando se apercebiam da minha nacionalidade diziam: - “Oh, não tens nada cara de argentina!” - nunca percebi o que eles queriam dizer com isso. Hoje posso afirmar que não sei se tenho cara, mas tenho, com certeza, um coração argentino e trago comigo os sonhos de uma terra que inspira resistência e magia. Estou longe e muitas vezes choro por ti, Argentina - de saudades e de vontade de te querer ver melhor.

Agora, o orgulho ultrapassa qualquer dimensão e faz com que o abraço se estique por todo o planeta, espalhando as sementes da vitória. Porque a Argentina merece ser o centro do mundo. Porque nós, argentinos, merecemos.

Y dale alegría, alegría a mi corazón
Es lo único que te pido, al menos hoy
Y dale alegría, alegría a mi corazón
Y que se enciendan las luces de este amor

(Mercedes Sosa, Y dale alegria a mi corazon)
Texto en Español

Argentina, el centro del mundo

Última hora: en el año 2022, Argentina se corona por tercera vez campeona mundial de fútbol. Las imágenes que llegan al resto del mundo son de locura total, un entusiasmo febril que impulsa a millones de personas a salir a las calles a celebrar.

Creo que, para muchos, este fenómeno no es bien entendido; Después de todo, solo estamos hablando de fútbol. Pero para los argentinos es mucho más que eso… Este momento representa el logro de una meta, una forma de superar obstáculos y la unión de un país que se entrega a la alegría. Esta gente sabe vivir el presente, la sangre latina corre por sus venas y la fiesta está asegurada.

Evidentemente estoy feliz por esta victoria, no tanto por el fútbol, ​​sino sobre todo por sentir el calor de la gente con la que comparto mis orígenes. Este pueblo sabe de memoria el sacrificio, el dolor, el sufrimiento. A pesar de tener innumerables recursos, Argentina es un país muy inestable en términos económicos y sociales y su gente es excelente en el arte de lograr sobrevivir cada mes, cada alza de precios, cada puñalada de inflación. También tienen que gestionar la falta de seguridad, la violencia y la corrupción. Sin embargo, los argentinos no se dan por vencidos, nunca dejan nada por decir. Luchan, se manifiestan, protestan. Salen a la calle, siempre.

Y yo soy heredera de esa voz que no se calla. Recuerdo, de niña, en Portugal, unos chicos, al darse cuenta de mi nacionalidad, decían: - “¡Ay, no tenes cara de argentina!”. - nunca entendí lo que querían decir con eso. Hoy puedo decir que no sé si tengo cara, pero ciertamente tengo corazón argentino y llevo conmigo los sueños de una tierra que inspira resistencia y magia. Estoy lejos y muchas veces lloro por ti, Argentina – por extrañárte y queriendo verte mejor.

Ahora, el orgullo supera cualquier dimensión y hace que el abrazo se extienda por todo el planeta, esparciendo las semillas de la victoria. Porque Argentina merece ser el centro del mundo. Porque los argentinos lo merecemos.

Y dale alegría, alegría a mi corazón
Eres lo único que te pido, al menos hoy
Y dale alegría, alegría a mi corazón
Y que enciendan las luces de este amor
(Mercedes Sosa, Y dale alegría a mi corazón)

Comentários

Mensagens populares